Pasando a los hechos, aparecen los humanos y llega el que para mí es el momento más sobrecogedor. Una humanidad que ni siquiera sabe caminar, sentada en sofás y viviendo conectada a través de una pantalla. Ni el mismo Matrix puede ser más chocante, solo que en Wall-E esta crítica a la humanidad o, en este caso, el capitalismo, intenta ser graciosa, porque sí, lo es; pero si nos paramos a pensar vemos que nuestra realidad no es tan diferente a la que se ve en la película.
También excelente comedia, donde los robots son los protagonistas, en especial el limpiador, quien supongo que todavía está buscando algo de suciedad en la nave.
El único problema que le encuentro a la película es que sabe cual es su finalidad y a quien va dirigida, y tiene que terminar bien. Hay un momento en el que la ([spoiler] pérdida de memoria de Wall-E [/spoiler]), película toma otra dimensión pero no puede acabar así, por motivos obvios. Demasiado tuvimos con la madre de Bambie y el padre de Simba.
Pixar muestra otra vez el corazón de sus películas y hace disfrutar a niños y a mayores de buen cine, del que hay poco, y hay que compartir. Si os gusta Charles Chaplin, esta es vuestra película.
